Sound Artist and Designer Richard Chartier closes out 2011 digging out some unreleased tape recordings spanning 1991-1993. Richard may disagree, but this doesn’t sound the least bit dated. Notes on this release from the 3particles website state “all materials recorded by Richard Chartier using various synthesizers in bedrooms sitting on the floor. Recovered from audio tape with subsequent minimal EQ and crossfades as intended. hiss and distortion was inevitable.”
While the hiss and distortion was inevitable, I feel this added character to the release and made for a more intimate experience. In total, the release clocks in at two hours and with a price tag of only $10 USD, you can’t really go wrong. This is the first work to be released on Richard Chartier’s own 3particles label since 2008’s Absence. Besides prepping for 2012’s LINE releases, Chartier mentioned on his Facebook artist page “just completed a pinkcourtesyphone rework/remix for Christopher Willits.” pinkcourtesyphone is another alias he has been working under that as of yet tends to show a darker side to his work. Almost as if David Lynch started producing drones. This has been in HEAVY rotation since it’s release, highly recommended listening.
—sound localization report, US
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Los sonidos lejanos. Como si algo tratase de abordarnos, a la mitad de una oscuridad, alguna violencia. No hay calma aunque impere el silencio; con cada minuto damos un paso más a la profundidad, alejados de la luz, de la esperanza melódica, de la esperanza. En la oscuridad hay solo amenazas.
El sonido, como un sistema de psicologismos, se entiende premeditado; hay mentes capaces de llevarnos de las manos tensas, helados y llenos de miedo, para transportarnos a las habitaciones oscuras. No son todas las mentes, solamente algunas pocas.
El gis presente en todas las cintas bloquea cualquier sensación del espacio. La experiencia nunca es multidimensional, más bien claustrofóbica. No es tampoco onírica, en ningún sentido; los sonidos (lejanos) aparecen como productos del subsuelo.
Quisiera decir “infierno”, pero aquello sería una exageración. Más bien hablamos del mar. Del mar profundo.
“Todos los materiales fueron grabados por Richard Chartie, utilizando varios sintetizadores, mientras estaba sentado en el piso. Se recuperaron los archivos de cinta y se agregaron, nada más, algunos detalles de la ecualización y volumen. El gis no pudo borrarse, como tampoco la distorsión”. Hay poco, muy poco, distorsionado.
Son piezas largas, que nos llevan a imaginar sin meditar en ningún punto. Procesos distintos: la meditación es un ejercicio introspectivo; el imaginar nos lleva a paisajes externos.
Olvidemos la música: LINE ataca los experimentos sonoros en cuanto a fenómeno sensorial, nunca rítmico o melódico. Estamos más cerca de escuchar la lluvia que de otras razones. El paisaje natural. Los audífonos son necesarios.
Esto se grabó en 1991. En el piso de algún cuarto, pienso a lado de una cama. Y me parece imposible. Porque no hay rastro humano.
La imagen es clara: nos acercamos, sin acercarnos, a alguna Boca del infierno. Aunque exageremos un poco; pensamos, más bien, en el mar. En una caverna del mar profundo. Audífonos.
—afterpop.tv